Despierta tranquila
la siesta requerida,
abominable es su encanto
cuando despierto sigo.
No hay negación que se le resista
por más preparado que esté
por mas terquedad que acumule;
esas cosas te hacen invisible
impidiendo que pueda verte
en alguna perfecta sobriedad.
Tu sinceridad te hace imposible a mis ojos,
por más que te busque
sé que bien escondida estarás;
no es buena época para soñar
sobretodo si huyes de mis sueños.
La siesta no ganó esta vez,
y es que la función de hoy es estar
en automático
no propiciar nada y rogar por un acto divino.
Tu sinceridad tan clara te hace invisible
a mis errores...
y obviamente prefieres seguir deambulando por ahí
evitándome.
**FiN**
No hay comentarios:
Publicar un comentario