Luego de mil batallas
extraño a cada instante tu dulce voz
aquella que me hace reir en medio de mis conflictos
la que atesoro en mis silencios mas eternos.
Mis noches, tus bellos ojos las alumbran,
y en cualquier descampado, leo tus cartas
y duermo un plácido sueño a tu lado;
los enemigos no los veo
no los oigo ni los siento...
son internos.
Ando por lugares que nunca anduve
en donde el burgues quiere extender sus dominios
en base al dinero y al poder;
yo soy fiel a tu amor
usted es la dueña de mi territorio
mi nueva conquisto
que deseo tener hasta mi senectud.
Hermosa doncella
debo partir por unos instantes
tal vez sea un breve alejamiento
y al regreso, nuestro paraiso sea mas extenso...
No me iré muy lejos
siempre estaré ahi en su corazón
No tema que la Rosa de los Vientos
me cuidará,
y en cada cantar mio
observaré su corazón,
aquel que he conquistado,
ya que he sido conquistado por usted
y muy dificilmente encuentre otra dueña
Mi eterna conquista...
la doncella de este cuento.
**FiN**
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